El ser humano tiende a buscar la comodidad y la seguridad en su vida. Acostumbramos a mantenernos en la seguridad y comodidad de nuestra zona de confort, pero ¿qué pasa cuando deseamos crecer, evolucionar y alcanzar esos objetivos que tanto deseamos?
La Zona de Confort y el Miedo
La zona de confort es ese espacio donde operamos en piloto automático, sin cuestionar nuestras acciones ni enfrentar grandes desafíos. Sin embargo, si queremos crecer y alcanzar nuestras metas, muchas veces resultará necesario salir de esta zona.
Al dar ese primer paso fuera de nuestra zona de confort, entramos en la denominada zona del miedo. Aquí es donde nuestras creencias limitantes, nuestros juicios y nuestras emociones negativas tienden a frenarnos. El miedo al fracaso, al rechazo, a equivocarnos, pueden ser factores que nos impiden avanzar. Sin embargo, el coaching nos brinda las herramientas necesarias para enfrentar esos miedos y superarlos.
¿Y si nos lanzamos a la piscina?: Desarrollando nuevas habilidades
Al superar los obstáculos de la zona del miedo, entramos en la llamada zona de aprendizaje. Aquí es donde adquirimos nuevas habilidades, conocimientos y competencias que nos permiten crecer y evolucionar.
Aprender no se trata solo de adquirir información, sino de poder aplicar ese conocimiento en nuestra vida diaria. Es incorporar nuevas habilidades y mejorar nuestra competencia para lograr resultados nuevos y diferentes. Una vez en aquí, es donde llega la magia.
Llega la magia, sin trucos.
Finalmente, superada la zona de aprendizaje, podemos llegar a la zona mágica. Esta es la zona de la satisfacción, la plenitud y la realización personal. Aquí es donde nos sentimos en armonía con nosotros mismos y alcanzamos nuestros objetivos más ambiciosos.
En la zona mágica, desarrollamos una autoestima sólida y una confianza inquebrantable en nuestras capacidades. Nos convertimos en personas seguras y capaces de enfrentar cualquier desafío.
Si estás buscando la motivación para lograr salir de tu zona de confort, recuerda que todo eso que sueñas, está fuera de ella. ¡La magia llega, sin trucos!.